Hay dos tipos de diabetes: la diabetes tipo 1 y la diabetes tipo 2. La diabetes tipo 1 es una enfermedad crónica que afecta a personas cuyo páncreas no puede producir insulina. La diabetes tipo 2 es una enfermedad relacionada con la alimentación, y puede revertirse. Este sitio web está dedicado a explorar las formas en que podemos revertir la diabetes tipo 2.
¿Qué causa la diabetes tipo 2?
Básicamente, la diabetes tipo 2 es una enfermedad alimentaria que afecta a personas que tienen demasiada azúcar en el cuerpo. Nuestro cuerpo almacena energía en forma de azúcar y grasa en diferentes partes. Cuando ya no puede almacenar más azúcar, se produce un desequilibrio que causa problemas. Es entonces cuando el médico te dice que tienes diabetes.
Imagina que sigues comprando comida y la guardas en el refrigerador. Cuando se llena, la pones en el congelador. Y cuando el congelador también se llena, dejas la comida afuera; si no la consumes, se echa a perder. En el cuerpo sucede algo similar: cuando el almacenamiento está saturado, empiezan a aparecer problemas.
Otra forma de verlo es imaginar un armario al que le sigues metiendo ropa. Al principio todo cabe bien. Cuando se llena, guardas la ropa extra en cajas debajo de la cama. Y cuando ya no hay más espacio, la ropa se apila en el suelo, lo que dificulta el paso. Si no se controla, el desorden atrae polvo, plagas y moho, arruinando todo el guardarropa. Del mismo modo, cuando el cuerpo almacena más energía de la que puede manejar, surgen problemas de salud.
¿Dónde almacena energía el cuerpo?
El azúcar o glucosa se almacena principalmente en el hígado y en los músculos. La grasa se guarda en células especiales llamadas adipocitos (o lipocitos).
¿Cómo almacena energía el cuerpo?
El hígado convierte la glucosa en una sustancia llamada glucógeno y la guarda en células llamadas hepatocitos. Los músculos también transforman glucosa en glucógeno y la almacenan. Además, parte de la glucosa se convierte en ácidos grasos, que son los componentes básicos de la grasa. Una hormona llamada insulina es la que regula todos estos procesos.
¿Dónde se produce la insulina?
La insulina es una hormona relativamente pequeña producida por las células beta del páncreas. El páncreas está ubicado entre el estómago y la columna vertebral. Las células beta detectan el nivel de azúcar en la sangre y liberan insulina para mantenerlo equilibrado. Cuando el azúcar entra en estas células, se convierte en energía, lo que envía señales para que se libere insulina. Esto ayuda al cuerpo a absorber la glucosa y a reducir su concentración en la sangre.
¿Cómo regula la insulina el azúcar en la sangre?
La insulina funciona como una llave que encaja en cerraduras especiales llamadas receptores. Estas cerraduras están en las membranas (paredes) de las células. Cuando la insulina se une al receptor, permite que la glucosa entre en la célula desde la sangre. En el hígado y los músculos, la glucosa se convierte en glucógeno. En las células grasas, la glucosa se transforma en ácidos grasos.
¿Qué pasa cuando consumimos demasiada azúcar?
Si una persona consume carbohidratos constantemente (que se digieren como glucosa), el nivel de azúcar en la sangre se eleva, y el páncreas sigue produciendo insulina. Con el tiempo, los receptores de insulina en las paredes de las células —especialmente en músculos e hígado— dejan de responder correctamente. Aunque la insulina se une a su receptor, no envía las señales necesarias para mover los transportadores de glucosa hacia la membrana celular.
Un ejemplo es que, aunque la insulina encaja en los receptores de insulina en las paredes celulares, no inician las señales necesarias para mover los transportadores de glucosa que están dentro de la célula hacia la membrana. Estas estructuras, similares a vesículas, normalmente permiten la entrada de glucosa en las células. En su ausencia, la glucosa ya no entra en las células desde la sangre. Decimos entonces que existe resistencia a la insulina. Las células de los tejidos no responden de manera normal a la insulina. En esta etapa, el consumo excesivo de carbohidratos aumenta aún más la resistencia a la insulina y la glucosa permanece en la sangre en niveles elevados. Si una persona tiene una concentración de glucosa en sangre superior a 100 mg/100 ml al despertar cada día, se considera que esa persona es diabética. El individuo puede experimentar síntomas específicos.
¿Se puede revertir la diabetes tipo 2 de forma natural?
La diabetes tipo 2 puede parecer un diagnóstico abrumador, pero la buena noticia es que puede revertirse. Así como una nevera sobrecargada o un armario desordenado provoca caos, nuestro cuerpo también sufre cuando alcanza su límite de almacenamiento. Sin embargo, al tomar decisiones alimentarias conscientes, reducir el consumo de carbohidratos y mejorar la sensibilidad a la insulina, podemos restablecer el equilibrio y recuperar la salud. Comprender cómo el cuerpo almacena y procesa la energía es el primer paso para recuperar el control.